Poder conservar este original es un lujo, ya que se convierte en un pedacito de la historia del cine de la década de los 70 y 80. Estamos ante una pieza de coleccionismo auténtico, muy lejos de cualquier reproducción actual, esto hace que este cartel se convierta en «objeto» casi único de coleccionismo. Los pliegues que se observan son de alguna manera parte del encanto del objeto, ya que dotan la pieza de autenticidad y nos muestran las arrugas naturales del paso del tiempo.
Las fotos son parte importante de la descripción del producto, ya que revelan con transparencia fiel el estado del «póster» en cuestión. Insistimos en esta cuestión, ya que es importante que el futuro custodio o custodia de la pieza sepa apreciar y valorar estos razonables «defectos», o minúsculas «taras» causadas por el paso del tiempo.
Las dimensiones de este tipo de cartelería de cine solía ser de 72 x 102 cm aproximadamente, pudiendo variar unos centímetros más o menos, dependiendo de la productora en cuestión.
El envió y manipulación del producto será realizado con el máximo cariño y cuidado. Podrá ser enviado plegado para no forzar nuevas arrugas en el papel, o enrollado en tubo de cartón si de esta manera se consiguiera conservar mejor la obra original.